La “cadena de valor” es un concepto que incorpora la definición de “cadena” entendida como el conjunto de agentes económicos que contribuyen directamente en la producción, transformación y distribución, hasta el mercado del consumo, de un mismo producto (Fabre, 1994). Al mismo, tiempo que hace referencia a la definición de “valor” que constituye el contexto de cambios y transformaciones, donde el conocimiento y la capacidad de innovación se constituyen en las variables estratégicas para generar desarrollo económico integrado y la necesidad de las empresas de optimizar sus estructuras de costos y sus capacidades de innovación productiva, para mantener el posicionamiento competitivo en el mercado (Herrera, 2002).